Andrés Garcia

El más allá

Hay veces me pongo a pensar en lo espontánea que puede ser la vida. Pensar en mis abuelos por ejemplo, todos los momentos que compartí con ellos y todas las enseñanzas que dejaron. Recordar sus pasos que desde el primer rayo de sol se podían escuchar retumbando por su hogar. Con su solo acto de presencia se les podía sentir la vida. Pensar que ya no están. Por muy vívidos que sean sus recuerdos, sus voces jamás serán escuchadas de nuevo, su presencia terrenal ya no es mas y solo se puede acudir a los fogosas imágenes que llevo en mi cerebro.


En cualquier momento la vida se nos puede escapar, estamos a un suspiro de pasar a el más allá, nunca se puede saber el día que se va morir. Por esa simple razón deberíamos siempre valorar a los que queremos y nos rodean, dejar esas pequeñas diferencias que nos puede estar separando de un familiar, una amistad o un gran desconocido. No se vaya a dormir peleado con su pareja, o tus hijos, o tus padres o tu familiar o un amigo, no sabemos cuando en cualquier momento ya no van a estar. Dile te quiero, píde perdón o da perdón, solo estamos intentando sobrevivir este viaje.

Peace and love!